Sheinbaum no descarta represalias tras arancel del 50% al acero mexicano

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un incremento del arancel al acero y aluminio mexicanos, elevándolo del 25% al 50%, sin una negociación previa. La medida entrará en vigor el 4 de junio, afectando directamente a la industria mexicana y sus exportaciones.

Desde la imposición del arancel inicial del 25%, el Gobierno de México ha calificado la medida como injustificada, argumentando que Estados Unidos exporta más acero del que importa.

El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, ha reiterado que esta decisión perjudicará sectores clave como la automotriz, construcción, metalmecánica y electrónica.

La Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) ha instado a la presidenta Claudia Sheinbaum a aplicar tarifas de represalia, advirtiendo que el nuevo arancel pone en riesgo 75% de las exportaciones de acero mexicano, valuadas en 2,100 millones de dólares.

Respuesta del Gobierno de México

Ante la nueva imposición, Claudia Sheinbaum ha optado por una estrategia de negociación y diálogo con su principal socio comercial. El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, viajará a Washington el 6 de junio para reunirse con representantes del gobierno estadounidense y buscar una solución.

Ebrard ha calificado la medida como “injusta, insostenible e inconveniente”, argumentando que Estados Unidos tiene un superávit comercial con México en este sector. Además, ha señalado que la imposición de aranceles no tiene sentido en un mercado con superávit y que su impacto económico será difícil de sostener a largo plazo.

El Gobierno de México espera que las negociaciones con Estados Unidos permitan una exclusión del país de este nuevo arancel. Sin embargo, si no se logra un acuerdo, se podrían aplicar medidas espejo para contrarrestar el impacto en la industria nacional.

Con información de El Financiero

*BC